Diabetes y Sexualidad

Hay diabetes Tipo I y Tipo II, en cualquiera de su dos tipos dentro de los 10 primeros años produce, disfunción sexual por la caída de la testosterona y los estrógenos, los trastornos sexuales afectan sobre todo a la fase de excitación.
En el hombre produce disfunción eréctil (conocida como impotencia) y tiene su origen en los trastornos circulatorios y neuropáticos que la enfermedad provoca.
En la mujer se han comprobado los trastornos del deseo, las dificultades en la lubricación vaginal y la incapacidad para lograr el orgasmo, la disminución o ausencia del libido o del deseo, debido a que los altos niveles de glucosa pueden ocasionar cansancio intenso, lo que conlleva a baja del deseo. El problema sexual más frecuente son las dificultades para obtener una adecuada lubricación por afectación de la excitación asociada a una falta de expansión vaginal, lo que conduce a unas relaciones coitales irritables y dolorosas dándose disminución del deseo e incluso rechazo a las relaciones sexuales. Otro factor que produce el rechazo sexual es la frecuente aparición de infecciones vaginales, propiciadas por los elevados niveles de glucosa, que provocan molestias (como mal olor, picor, sensación de suciedad).